Empecemos con una aclaración importante: nos encanta, nos fascina, nos vuelve locas Desatranques Jaén. Y sí, lo reconocemos, incluso hemos cantado en alguna noche de fiesta su tema musical.

Para el que no conozca este megahit de las redes sociales, resumimos el fenómeno: Desatranques Jaén es una pequeña empresa dedicada a la limpieza de tuberías, bajantes y canalones, entre otros servicios. En 2015 deciden hacer un villancico para felicitar las fiestas a sus clientes. En Youtube tuvo cierta relevancia, pero el boom llegó en diciembre de 2018 cuando @enmachuk lo compartió en Twitter. El tuit tuvo un éxito inesperado: más de 20.000 interacciones entre retuits y “me gustas”.

El vídeo en cuestión es este, que hoy cuenta con casi 445.000 visualizaciones en Youtube:

En efecto, no tiene más: una canción ciertamente pegadiza y con reminiscencias líricas al poema Andaluces de Jaén de Miguel Hernández, unas cuantas fotos y un montaje hecho con Windows Movie Maker.

Nos gusta por su sencillez, por cómo nos conecta con cierta realidad que nos rodea y, también, por ser una pequeña idea nacida en una pequeña empresa que autogestiona su publicidad porque, probablemente, no puede permitirse invertir en este tipo de servicios. Pero sobre todo, nos encanta porque ha conseguido hacerse viral sin proponérselo. Y eso, amigos, es lo más divertido de las redes sociales.

Ahora bien, su gran éxito transmite de paso una serie de ideas que no benefician en absoluto a la imagen de nuestra profesión, y más, a la imagen de las personas que la desarrollamos en territorio andaluz. Algunas de ellas:

• En Andalucía lo solucionamos todo con una cancioncita y un chiste. Y no. Puede que seamos eso -menos mal-, pero somos mucho más que eso. Desde nuestro ámbito geográfico y cultural ENTENDEMOS Desatranques Jaén, pero lamentablemente, en el resto de España no tienen por qué entenderlo igual. Siguen existiendo muchos tópicos sobre los andaluces, y tenemos que deshacernos de ellos cuanto antes.
• Su éxito es fruto de la casualidad. Y esto no nos viene nada bien. Hay que dejar claro que Desatranques Jaén es una rara avis. Ni el trabajo de producción de vídeo -en la canción no nos metemos, nos encanta- ni el de planificación y gestión de redes sociales son labores menores, necesitan de formación y MUCHA dedicación.
• Resumiendo, en Andalucía somos poco profesionales. Tal vez, por lo poco que se ajusta a nuestra realidad, este es el peor de los sambenitos que arrastramos.

Desatranquemos Andalucía

Solo en Andalucía hay cuatro facultades de Comunicación, a las que cada año se incorporan cientos de jóvenes entusiasmados con ser periodistas, publicistas y comunicólogos comunicadores… como quiera que se llame a los que han estudiado comunicación audiovisual. Nosotras fuimos de esas incautas estudiantes.

Al salir, nos encontramos una realidad bastante diferente. Sabemos que esta situación no es exclusiva del ámbito de la comunicación, pero hablamos de nuestra experiencia. Y esta experiencia no es otra que, al terminar la carrera, hubo una migración generalizada a otras zonas de nuestro país -alerta eufemismo: por zonas de nuestro país nos referimos a Madrid y Barcelona-. Algo comprensible, porque en nuestra querida Andalucía parece no moverse nada, siguen faltando oportunidades, reconocimiento y, valga de autocrítica, falta de confianza en nuestras capacidades.

Ya os hemos contado en alguna ocasión que Sábado nació de las ganas de mantener -o recuperar- nuestras posiciones, de quedarnos en nuestra bienamada Córdoba. No es una cuestión de ideología ni se trata de una postura política, es nuestro sentido común el que nos ha llevado a hacerlo: si nadie se queda en casa -creando, inventando-, los que vienen detrás se seguirán yendo fuera. Sábado es nuestro pequeño granito de arena, por todos nuestros compañeros, sí, pero por mí, primero.

Mañana es día de celebrar. Por eso, mientras leéis esto, probablemente estemos planeando el perol y/o una pequeña escapada.. Pero antes nos hemos dejado hechas las tareas, porque también es día de pensar. Ya os lo pedía Desatranques Jaén: “Decidme en el alma quién, quién atrancó tu destino”.